domingo, 8 de mayo de 2011

La Permanencia en el Poder en las CCAA (II)

Desde la última vez que ofrecimos al sufrido lector este cuadro con los datos de la permanencia en el poder de los mandatarios de nuestras Comunidades Autónomas ha habido cambios significativos. Señalábamos entonces un grupo de CCAA (Murcia, La Rioja, Navarra, Asturias, Aragón y Castilla y León) cuyos presidentes habían superado el límite de los 8 años en el poder y que corrían el riesgo de eternizarse en el ejercicio de sus funciones. A este grupo seguía otro formado por Castilla-La Mancha, Madrid, Valencia y Cantabria, en el que todavía no se había alcanzado dicho límite, pero en el que, de cara a las elecciones de 2011, podían superar esa barrera de los 8 años si volvían a presentar a los mismos candidatos.





A unos días de que se celebren las elecciones del 22M, tenemos que seguir señalando en la zona roja de la tabla a un grupo de CCAA cuyos presidentes parecen querer "reinar" sin ningún límite temporal. Algunos mandatarios de este grupo, como Murcia, La Rioja y Navarra, podrían alcanzar, si volviesen a ganar las elecciones, la cifra escandalosa de 20 años en el poder...


De este grupo ominoso, sin embargo, se han desmarcado afortunadamente dos CCAA, ambas socialistas -Aragón y Asturias- cuyos presidentes anunciaron su intención de no presentarse a la reelección. Ambos anuncios han sido -junto con la renuncia de Zapatero- las grandes noticias en el ámbito de la limitación de mandatos de nuestros políticos y han logrado despoblar ese grupo de gran apego al poder... Dejando además en solitario al PP el dudoso honor de encabezar el listado de los más longevos en el poder... (Sorprende, no obstante, que el PSOE no haya sacado partido de esta circunstancia, haciendo de la limitación de mandatos uno de los temas de la campaña electoral).


En el segundo grupo de CCAA, sin embargo, no ha habido grandes cambios, de modo que para los presidentes de Cantabria, Madrid, Castilla-La Mancha y Valencia no parece haber servido de disuasión el límite de los 8 años en el poder y aspiran a extender sus mandatos hasta los 12 años...


La solución... el próximo día 22.

Qué me Gusta y Qué no me Gusta de UPyD

Me gusta:
1. Que sea la opción política de Fernando Savater
2. Su discurso sobre la debilidad del poder central del Estado que le coloca en manos de los nacionalistas vascos y catalanes cada cuatro años
3. Muchas de sus nuevas formas de hacer política: emitiendo bonos, usando correctamente las redes sociales, haciendo esfuerzos por estar cerca de las bases
4. Que ofrezcan a los electores una alternativa de voto real en muchas circunscripciones (que de otro modo no sabrían muy bien a quién votar).
5. Que tengan un discurso homogéneo en todas las CCAA
6. Su defensa de las instituciones “neutrales” del Estado (Tribunal Constitucional, Consejo General del Poder Judicial, órganos reguladores de la actividad económica, etc.).
No me gusta:
1. Su tono mesiánico: va bueno el que se crea que un ascenso importante del voto a UPyD va a producir de la noche a la mañana la regeneración de la democracia española
2. Su populismo; un mala costumbre de los partidos en la oposición: que alguien protesta por algo, pues yo lo apoyo (y ya de paso le meto el dedo en el ojo al Gobierno)
3. Su falta de propuestas a nivel autonómico y local: no puede ser que, por ejemplo, el primer punto del programa del candidato a la Comunidad de Madrid sea… cambiar la legislación electoral… perdone, pero si esa legislación no se hace en la Asamblea madrileña; hágame propuestas sobre la sanidad, educación, transportes regionales, etc.
4. Hacer propuestas irrealizables (a veces un poco demagógicas): ¿de verdad va a poner UPyD como contrapartida de partido bisagra cambiar la Constitución para reformar las normas electorales y retornar ciertas competencias al Estado central…? Mejor sería hacer propuestas más realistas que puedan ser asumidas por un PP o un PSOE necesitados de apoyos parlamentarios… De otro modo estos partidos volverán a mendigar el apoyo de los nacionalistas vascos y catalanes y no habremos adelantado nada.
5. La vaguedad de su programa económico, en un momento en que es fundamental ofrecer a los electores una salida a la crisis.
6. Que les apoye Pedro J. Ramírez